La nutrición no cura la ERC, pero es una herramienta poderosa para vivir mejor con ella.
Nutrición para Pacientes con Enfermedad Renal Crónica (ERC)
La alimentación juega un papel fundamental en el manejo de la Enfermedad Renal Crónica. Una nutrición adecuada no solo ayuda a preservar la función renal restante, sino que también mejora la calidad de vida del paciente y reduce el riesgo de complicaciones.
En esta sección, te orientamos sobre cómo adaptar tu dieta a las diferentes etapas de la ERC, considerando aspectos clave como el control de proteínas, sodio, potasio, fósforo y líquidos, según tu condición clínica y el tratamiento que estés recibiendo (diálisis o no diálisis).
Nuestro objetivo es brindarte información clara, segura y respaldada por profesionales en nutrición renal para ayudarte a:
- Mantener un equilibrio nutricional saludable.
- Controlar los niveles de presión arterial y electrolitos.
- Reducir la carga de trabajo de los riñones.
- Evitar la desnutrición y conservar masa muscular.
- Sentirte con más energía en tu día a día.
Cada paciente es único. Por eso, recomendamos siempre consultar con un nutricionista especializado en enfermedad renal, quien podrá diseñar un plan de alimentación personalizado y ajustado a tus necesidades médicas.
¿Qué se debe controlar en la dieta renal?
Dependiendo de la etapa de la enfermedad, es necesario ajustar el consumo de:
- Proteínas (para evitar la acumulación de desechos nitrogenados)
- Controlar los niveles de presión arterial y electrolitos.
- Sodio (para controlar la presión arterial y evitar la retención de líquidos)
- Potasio (para prevenir alteraciones cardíacas)
- Fósforo (para proteger huesos y vasos sanguíneos)
- Líquidos (en algunos casos, para evitar sobrecarga en los riñones)
Alimentos que deben controlarse
- Carnes procesadas y embutidos: jamón, salchichas, tocino (ricos en sodio y fósforo)
- Productos enlatados o precocidos: sopas instantáneas, comidas congeladas
- Lácteos enteros: leche, queso curado, yogur (alto en fósforo y potasio)
- Frutas ricas en potasio: plátano, naranja, melón, kiwi
- Verduras ricas en potasio: tomate, espinaca, papa, remolacha
- Bebidas oscuras: colas, té negro, café fuerte (por fósforo y cafeína)